El foro lamenta la muerte de Carlos Perales, hombre honrado y colaborador leal en la recuperación de la memoria histórica

El Foro por la Memoria del Campo de Gibraltar y la Asociación de Familiares de Represaliados por el Franquismo en La Sauceda y el Marrufo (Afresama) lamentan profundamente la muerte de Carlos Perales, máximo responsable de memoria histórica en la ejecutiva andaluza del PSOE y director del servicio de Memoria en el departamento de  Ciudadanía de la Diputación Provincial de Cádiz. El foro quiere expresar a sus familiares y compañeros su más sentido péseme y quiere hacer públicos la admiración y el agradecimiento que sentimos hacia Carlos por todo lo que ha hecho por la causa de la verdad, la justicia y la reparación, que son los objetivos fundamentales de quienes luchamos por los derechos de las víctimas del franquismo y por la salud democrática de este país.

Carlos Perales fue uno de los primeros en investigar el genocidio contra la población civil cometido por las autoridades franquistas y sus colaboradores en el cortijo jerezano del Marrufo, convertido en centro de detención, tortura y exterminio de buena parte de los habitantes de La Sauceda que sobrevivieron al bombardeo aéreo y la invasión del poblado el 31 de octubre de 1936. Él fue el primero en publicar un amplio artículo sobre este tema en la prensa provincial, en el año 2004, cuando el movimiento memorialista estaba empezando a coger fuerza en estas tierras. 

Siempre con amplitud de miras y buena disposición para el diálogo, Carlos colaboró en la investigación histórica previa a las exhumaciones que realizamos en 2012 en el cortijo del Marrufo, en las que rescatamos los cadáveres de 28 personas que allí habían sido asesinadas y enterradas en fosas comunes clandestinas. Y luego nos ayudó a levantar la Casa de la Memoria La Sauceda, en Jimena de la Frontera, un espacio público para la investigación y la divulgación que se ha convertido en un referente para toda Andalucía.

Su trabajo en la Diputación ha sido decisivo para muchas cosas en la recuperación de la memoria histórica en esta provincia, como por ejemplo las exhumaciones de fosas, la producción y edición de documentales, la publicación de libros, la atención a las víctimas, o la organización de jornadas, seminarios y encuentros. A nosotros nos ha dado un apoyo decisivo, pues gracias a su empeño la Diputación lleva tres años firmando un convenio de colaboración con el foro que nos permite sufragar buena parte de los gastos de mantenimiento y funcionamiento de la Casa de la Memoria. La colaboración de Carlos Perales con la casa no sólo ha sido como responsable de un departamento de la Diputación, también lo ha sido a título personal. Muchas horas de su tiempo libre dedicó al estudio y la investigación. Y él nos cedió, para su exposición en una de las vitrinas de nuestra exposición permanente, una pistola que fue propiedad del jefe de la Falange de Alcalá de los Gazules en 1936, pistola que fue usada en más de una ocasión para rematar a los vecinos que habían sido fusilados. Es uno de los objetos que más conmueven e impactan a los visitantes de la casa cuando les explicamos para qué fue utilizado.

El foro y Afresama van a tener siempre en el recuerdo a Carlos Perales, por su contribución a nuestra lucha y por su forma de ser. Tímido, muy educado, con voz baja y poco amigo de  alardes u ostentaciones, Carlos era una persona honrada, eficaz y cumplidora.  El relator especial de Naciones Unidas para la promoción de la verdad, la justicia, la reparación y la no repetición de crímenes de lesa humanidad se reunió en Sevilla en 2014 con las asociaciones, familiares de víctimas y responsables institucionales. Carlos Perales intervino en nombre del grupo de memoria histórica del PSOE. Lo primero que hizo fue pedir perdón por el olvido hacia las víctimas del franquismo durante los años de gobiernos sustentados por su partido. Luego aseguró que su compromiso era ahora firme y que apoyaba sin cortapisas las reivindicaciones esenciales de los represaliados, sus familias y las asociaciones memorialistas porque, dijo, el camino más directo hacia la convivencia es siempre la justicia. 

Podemos dar fe de que Carlos Perales cumplió su palabra y que mantuvo siempre su compromiso con la verdad, la justicia y la reparación. Donde quiera que estés, Carlos, seguiremos tu ejemplo e intentaremos no defraudarte.  

 

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